MANUEL GALLEGO JORRETO

Sirva como excusa la vivienda utilizada en el examen de esta mañana  para nuestro pequeño homenaje a Manuel Gallego Jorreto, a quien el Consejo Superior de los Colegios de Arquitectos de España acaba de otorgar la Medalla de Oro de la Arquitectura 2010.

La vivienda, finalizada cuando los alumnos de iala1011 llegaban al mundo, fue publicada por primera vez en el número 14 de Diseño Interior (abril 1992), donde el autor la describía:

El proyecto, una vivienda unifamiliar de vacaciones en Veigue (Sada, La Coruña), se encuentra en un lugar próximo a la costa, aislado, con espléndidas vistas a la ría.
El uso esporádico de la vivienda, el lugar y el deseo de los propietarios de cuidar sólo la parte de la finca más necesaria, condujeron a la reflexión sobre la relación y forma gradual de colonizar el espacio.
Así, se pensó en un núcleo cerrado, defendido y caliente. El espacio central: la vivienda formada por muros de hormigón chapados de mármol en el exterior y tablero de aglomerado de madera en el interior, en zócalos y extendiéndose al techo de la planta alta.
Este espacio se puede abrir ocupando total o parcialmente otra arquitectura más ligera que la rodea, formada por porches o galerías cubiertas de emparrados hasta llegar a marcar el espacio exterior, donde la arquitectura es simplemente un suelo horizontal y una barandilla. Todo ello bajo una estructura de viguetas que soportan zonas cubiertas, cerradas, abiertas o simples entramados, pudiéndose cerrar o abrir a voluntad. El resto debería ser el espacio natural, la vegetación, que se usará según convenga pero siempre contando con un refugio que hacia el exterior pierde gradualmente corporeidad y casi se hace vegetal.

En 1998, en la monografía de Tanais Ediciones, añadía:
Hoy me parece sugerente el planteamiento. Reflexionar sobre los límites como situaciones enriquecedoras, llegando a ensanchar las fronteras hasta hacerlas habitables, o diluirlas en lo natural.